domingo, 23 de septiembre de 2012

El sentido del dolor


Acaba de fallecer un familiar cercano, de 50 años, de forma repentina e imprevista. 
Estaba pensando en el sentido de lo que ha sucedido. 
Creo que no lo tiene. 
El Dios en el que creo no envía pruebas a sus hijos.
La Creación es un sistema abierto, no cerrado ni perfecto, habitado por la libertad y la posibilidad, en el que los hechos suceden.
Son las condiciones para que el hombre pueda desarrollar su libertad y su creatividad.
Y es luego el hombre el que puede dotar de sentido a lo que ha sucedido, viviendo todo desde el amor y el compromiso. Convirtiendo en camino lo que ha pasado.
Pero Dios no es un juez severo que nos manda pruebas para probarnos. 
Él, precisamente Él, que murió por amor a cada uno de nosotros en una cruz sinsentido, que Él llenó de sentido definitivo. 

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