domingo, 15 de junio de 2014

Pecado y Virtud

La experiencia del pecado sólo puede tenerse desde fuera del pecado. 
Una de las consecuencias del pecado es que ciega progresivamente nuestra capacidad para ser conscientes de él. Ésta ha sido una experiencia común en todos los santos. A mayor santidad, mayor consciencia de su finitud, su limitación y su pecado. 
El fruto de la vida en la presencia de Dios es la Paz. Una Paz que el mundo no puede dar. 

El camino del pecado frecuentemente logra una gratificación  inmediata y a corto plazo. Responder con violencia a una afrenta, reaccionar con agresividad a una agresión, la satisfacción inmediata y pulsional de nuestra sexualidad, consentirnos todos nuestros caprichos materiales.... 

Sin embargo, el otro camino, el camino de la virtud, es un camino a primera vista más arduo y sacrificado. Y lo es. Pero poco a poco va construyendo en nosotros un fondo de paz, de plenitud, de estar a gusto con uno mismo... mucho mas profundo y pleno que la gratificación inmediata. 

Y todos estos "sacrificios" surgen del amor. Más aún; surgen del Amor de Dios, que es fuente del amor que sale de nosotros. El amor que nos lleva a buscar una reconciliación cuando lo que nos sale es dar el portazo, el amor que hace que nos conduzcamos con paciencia, el Amor que nos hace renunciar a un bien material para dar ese dinero a los que realmente lo necesitan, el Amor que nos hace renunciar a una tentación que pasa por nuestro lado...

Y así como el Amor de Dios es fuente de nuestro amor, el Amor de Dios es fuente de nuestra sanacion
¿Qué sería de nosotros si no hubiera perdón, total, completo, sin condiciones, pleno? 
Ese perdón que surge de Dios es donde apoyamos nuestra finitud. 
Ese perdón, que surge del Amor, es el que nos posibilita empezar de nuevo, de cero. De cero nunca, porque Dios nos lleva a hombros :)
Encontrarte, experimentar, la hondura, la totalidad de ese Amor, es el manantial del que surge la vida eterna, aquí, ya, en esta vida. Si has experimentado este Amor, sabes lo hondo que es. Incomparable con cualquier otro tipo de amor en este mundo. 

Me sorprendente oírme hablar de pecado y virtud. Conceptos para mí, para la sociedad,  que suenan a antiguo, a desfasado... Será otra consencuencia del pecado?

Besos y abrazos,

Eduardo

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Licencia de Creative Commons
Este obra está bajo una licencia de Creative Commons Reconocimiento-NoComercial-SinObraDerivada 2.5 España.