sábado, 6 de abril de 2013

Fe

Creer o no creer, that is the question...

Andamos buscando para afianzar nuestra fe indicios racionales de que es verídico creer lo que creemos,
buscamos argumentos convincentes que nos aseguren nuestras creencias,
nos fijamos en personas que son referentes en la Humanidad y que creyeron o creen....
Pero al final, te la tienes que jugar.
O crees o no crees.
Igual que con todas las grandes decisiones de la vida: casarse, tener un hijo, seguir una intuición.... tendremos indicios que nos permiten atisbar que lo que hacemos es razonable... pero nuestra decisión implica a toda nuestra persona y supera la razón.

En estos días estoy pensando que en algún momento de nuestra vida, tendiendo a la madurez,
Dios nos va quitando, hace tambalearse, nuestros indicios racionales y nuestros mejores argumentos.

Todo se tambalea y queda la fe sola. Es Su regalo. Queda la Fe sola. Como una columna segura en medio de tu vida.Todo lo demás desaparece y la Fe adquiere su verdadero sentido. Creo porque decido creer. Porque me fío y apuesto mi vida en ese acto. Lo razonable y los argumentos desaparecen.

La fe se apoya en la Fe.

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